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Paquete de caramelos Jelly Belly Bean Boozled en paquete grande de 54 gramos, para una variedad de muchos sabores de frutas sabrosas que incluyen variedades como cereza, limón, mandarina, manzana verde, uva y regaliz. Estos dulces estadounidenses, compuestos de gelatina, tienen actualmente alrededor de 50 frijoles de colores diferentes y originales (porque realmente tienen forma de frijol), cada uno de ellos una bondad diferente, un sabor diferente, para saborear solo o en compañía. SABORES – SORTEN – SAVEURS, prueba la fruta del tío Jelly Belly en formato GRANDE de 70 gramos: Jelly Belly Bean Boozled | ¡Paquete grande!
Paquete de caramelos Jelly Belly Bean Boozled en formato grande de 54 gramos, para todos los sabores diferentes y sorpresas, incluidos plátano, mora, melocotón, limón, naranja, mango, manzana, pera, kiwi, sandía, mandarina, granada, pomelo, piña, cereza , lima, melón, arándano y frambuesa: en definitiva, ¡el que más tiene, más! Frijol borracho | Paquete grande, loco!
Un producto creado por una marca como Jelly Belly Candy Company no podía quedar fuera de mi selecto y valioso catálogo de productos americanos. Un auténtico must en USA, tanto para adultos como para niños. En mi tienda, además de esta, hay muchas otras soluciones diseñadas por esta famosa e histórica empresa. Descubre qué formato de Jelly Belly es el adecuado para ti, sobrino. ¡Todo está en mi tienda online!
Con más de 50 sabores diferentes creados (y muchos más en proceso, listos para ser lanzados), Jelly Belly es sin duda un modelo de sabor, amor y calidad. Y pensar que durante la Segunda Guerra Mundial la empresa Jelly Belly tuvo que adaptarse -y bastante- debido a la escasez de azúcar, ¡que por lo tanto tuvo que ser racionada muy, muy bien! Esta carencia encendió la creatividad de alguien que comenzó a pensar que podía crear algo innovador de acuerdo a las necesidades: una oblea nueva. Afortunadamente, entonces, al final de la guerra, la producción de "frijoles" Jelly Belly volvió regularmente a producir estas delicias. ¡Ahora es tu turno, nieto!
